EL ZURDITO GOLFER
Yo viajo pero es condición "sine quanon" que pueda desarrollar algunas de mis actividades, dijo el Zurdito Golfer al momento en que comenzaba a planificarse la travesía. Y del dicho al hecho, ni bien desembarcó en la villa sin siquiera desarmar sus petates partió rumbo a una escuelita rural en donde expuso una síntesis de su cátedra Plusvalía 1, donde explicó como se explota a los negritos caddies en los prestigiosos links de golf usufructuados por la burguesía cipaya y vernácula. Aquí lo vemos posando en el mencionado establecimiento luego de su disertación. Lamentablemente olvidó en su residencia de Buenos Aires, la remerita con la imagen de su ídolo, el "che" Guevara. Como dato de color, su charla fue grabada para ser transmitida en el nuevo canal de cable Golf 24 horas.
Tan grande fue el éxito de su exégesis, que no pudo resistirse a los reclamos de las fuerzas vivas de la zona, por lo cual partió de inmediato a una comunidad aborigen homosexual para enriquecerlos con su afamada conferencia "David Rockefeller, una mano negra en el cultivo de la mandioca". Al terminar la conferencia los asistentes entonaban el viejo himno: David, compadre..., mientras portaban pancartas con la foto del Topo Quarracino, el piquetero mayor. (CONTINUARÁ).
Tan grande fue el éxito de su exégesis, que no pudo resistirse a los reclamos de las fuerzas vivas de la zona, por lo cual partió de inmediato a una comunidad aborigen homosexual para enriquecerlos con su afamada conferencia "David Rockefeller, una mano negra en el cultivo de la mandioca". Al terminar la conferencia los asistentes entonaban el viejo himno: David, compadre..., mientras portaban pancartas con la foto del Topo Quarracino, el piquetero mayor. (CONTINUARÁ).
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